lunes, 30 de enero de 2012

La ley de la piel

Egon Schiele, Female Nude Lying on Her Stomach (1917)

No fueron inútiles aquellas noches,

aún puedo relamerlas.

Sentirse renacer entre sábanas ajenas,

pero blancas,

dota de alas a un alma condenada.

Salivas curanderas de heridas profundas,

lengua sanadora de incurables pesadillas.

Medicina ilegal que adicción crea.

No me la raciones tanto

que soy mujer de paz

conocedora de que el amor es secundario,

prescindible,

inútil como protección.

Sólo equipo mi cuerpo con una armadura:

la del deseo.

© Anabel

martes, 17 de enero de 2012

Interferencias

Volvemos a la carga con la sesión de enero cargada de buenos narradores y rapsodas, dirigida por los excepcionales showmans Berbi y Jalozas. Os esperamos en Interferencias Zaragoza.

jueves, 12 de enero de 2012

Extrema necesidad


Deseo que te claves en mí

como caso de extrema necesidad

de urgencia y sin miramientos,

profundo acto de adjetivo posesivo,

repentino despertar de la palpitación

del jugo fructuoso del amar por amar

libre de artificialidad

preñado de pasión blanca y húmeda,

muy húmeda.


Poséeme los ojos desde dentro

arrancando las pestañas si es preciso

como precisas son las lágrimas de rabia divina

porque sólo entonces entenderé el universo

y la eclosión de las semillas.


Escupe mi nombre en mi cuello

devuélveme mi identidad de hija perdida

hallada tras mil hojas olvidadas

de la verdadera exaltación del alma

y del dolorido cuerpo.


Dame lo que te exijo

y llévate, a cambio, mi último anhelo.


© Anabel

sábado, 7 de enero de 2012

No tan malas

Insiste en que la yema del índice no quede pegajosa y la chupa de nuevo. Está buena la nata. Se ha cortado demasiado trozo del roscón de Reyes, no se lo va a acabar. Más le vale, le espera su particular duelo con la báscula, reto al que no se piensa enfrentar hasta dentro de una semana. Eso es jugar haciendo trampas, pero es que la báscula es un enemigo temible. La fruta también está muy rica, sobre todo las cerezas. Queda su dulzor casi empalagoso en la boca durante un buen rato. Al final, la saliva lo arrastra todo, incluso el sabor de los besos. O tal vez no. Sonríe. No se puede quejar de cómo ha empezado el año. No ha habido grandes alharacas ni celebraciones de Fin de Año ni regalos impresionantes. Pero ha habido concordia familiar y felicidad en el embeleso de una nueva vida; ha habido amistad y risas a compartir; ha habido calor humano que se entrega sin exigencias; ha habido paz y la tranquilidad de saber que se han pasado estas fiestas sólo con la gente a la que verdaderamente se quiere.

Beatriz piensa que estas Navidades no han sido tan malas.

© Anabel